Mientras tanto, en un pueblecito de las medianías…
Una semana entre queserías, yoga, picoteos y películas que me recuerdan por qué escribir —y vivir— despacio
En lo profesional:
Cuando se acerca mi cumpleaños me pongo un poco nostálgica y me da por desenterrar recuerdos de infancia, como el que inspira el artículo que publiqué el martes en Materia Prima: Un cuento, leche y gofio. Es el primer relato que comparto, a medio camino entre la crónica y el cuento, donde describo con ojos de niña lo que probablemente fue una de mis primeras experiencias gastronómicas.



Materia Prima es mi espacio editorial sobre gastronomía, territorio y cultura, donde publico artículos, entrevistas, recetas y reportajes que exploran el origen de lo que comemos y las historias que hay detrás.
Dentro de este sitio vive Cuadernos en crudo, mi envío dominical por email: una carta más personal y directa, donde comparto los enlaces a mis artículos semanales, junto con reflexiones y descubrimientos desde una mirada íntima y cotidiana.
Tengo una agenda y un propósito. Lo que queda de año está marcado por un objetivo claro: visitar queserías, bodegas, fincas, molinos de gofio y cualquier otro lugar vinculado a los productos identitarios de Gran Canaria.
El plan oculto: conocer la isla donde nací a través de sus alimentos y del territorio que los hace posibles
Actualmente colaboro con Turismo de Gran Canaria (Cabildo de Gran Canaria) como freelancer, actualizando los textos gastronómicos de su web oficial. Iré compartiendo los enlaces cuando estén listos y contando todo lo que voy aprendiendo sobre el producto canario y las personas que lo hacen posible.
Quesería del sur de Gran Canaria
Mientras tanto, en un pueblecito de las medianías…
La semana ha estado marcada por la vuelta al gimnasio, después de un verano agitado en el que me sentí algo desconectada del cuerpo. Es hora de volver a cuidar cuerpo y mente, aunque todavía necesito que alguien me explique cómo usar tanta máquina.
Bienvenidos a Zion, la ciudad de las máquinas
Al entrar en Zion, me sentí tan abrumada que agarré una esterilla y me puse a hacer flexiones y sentadillas en una esquina poco concurrida. Ya mejoraremos eso; lo importante es ir, como dice Adriene 🎥, la popular instructora de yoga en casa:
Esa misma noche, para celebrarlo, improvisamos una tabla de picoteo con jamón ibérico, pan, quesos variados, frutos secos, higos y vino blanco. Me recordó a aquellas cenas de pa amb oli (pan con aceite) de mi época de estudiante en Barcelona. Otra vez, el recuerdo.
Picoteo en casa, mi cena favorita
🧭 En mi radar
🎬 Una película: La crónica francesa (del Liberty, Kansas Evening Sun) — Wes Anderson
Hay películas que son para pasar por ellas y otras para que te pasen. Para mí, las cintas de Wes Anderson son como subir a un tren y dejarse llevar por los paisajes, sin enfocar cada árbol o casa, saltando de la imagen general a la específica con una sensibilidad extraordinaria.
Todo ello acompañado de actuaciones y coreografías visuales que resultan profundamente placenteras.
Según Filmaffinity, es “una carta de amor al mundo del periodismo, ambientada en la redacción de un periódico estadounidense en una ciudad francesa ficticia del siglo XX, con tres historias interconectadas entre sí”.
Fotograma de The French Dispatch (Searchlight Pictures, 2021)
Mi mundo es la gastronomía, pero la inspiración se encuentra en otros lugares —como nos recordó en una visita al BCC la periodista gastronómica Rosa Molinero— y lleva razón: está en el cine, en el arte, en la literatura, en la ciencia. El conocimiento nos rodea.
📖 Un libro: Como agua para chocolate — Laura Esquivel
¿Ya he dicho que fue mi cumpleaños? Pues un amigo me regaló este delicioso libro donde la cocina se convierte, de forma literal, en lenguaje del alma. Y acertó tanto… que ya me lo había leído. De hecho, es uno de mis favoritos para releer.
Portada de Como agua para chocolate, de Laura Esquivel (Editorial Planeta, 1989)
A través de la historia de Tita, una joven condenada por la tradición familiar a no casarse y cuidar de su madre, la autora mezcla realismo mágico, recetas y emociones para narrar una pasión contenida que se expresa en cada plato.
Ambientada en el México revolucionario, la obra celebra el poder transformador de los sentimientos cuando se cocinan con honestidad.
Por cierto, además de la película de los noventa, ha sido llevada al formato serie para la plataforma Max (antes HBO Max) en 2024:
Feliz siesta 🌻
NOTA: Esta semana también he iniciado la búsqueda de patrocinadores: estoy tanteando marcas y proyectos afines que deseen apoyar Cuadernos. Me tomo este proceso con calma —y con mucha exigencia— porque quiero que cada colaboración sume sin comprometer la independencia de los textos.
Aspiro a construir alianzas con marcas que compartan los valores de este espacio y que me permitan seguir escribiendo, descubriendo y cultivando esta comunidad con libertad y coherencia.








